Todos los veranos, sin excepción desde hace al menos cuatro, vuelvo a John Fante. Cada verano una novela distinta, que comienzo con ilusión y termino con mucho esfuerzo. De un año para otro olvido que en realidad Fante nunca me ha acabado de convencer del todo, pero aún así le doy una nueva oportunidad. Alguien algún día debería recopilar todas esas afinidades intermitentes que tenemos los lectores y escribir una historia de la literatura a regañadientes, con los autores que sí, pero que no.
Pero estaba con Fante, que no sé si habéis leído alguna vez, y con la novela fantesca del verano de 2014: Llenos de vida (Anagrama, 2010). Una historia que —como sucede en las novelas de Hornby y Orwell que también he reseñado este verano— gira alrededor de la paternidad (más que de la maternidad). El protagonista, que también se llama Fante, vive una existencia plácida y vulgar en una casita de nueva planta. Son los años cincuenta del siglo pasado, y nuestro Fante ha decidido dejar atrás los años rebeldes para asentar la cabeza y vivir el sueño americano.
La placentera situación se ve alterada cuando de su estandarizado hogar, pagado solventemente con los réditos económicos de sus exitosos guiones, comienzan a emerger defectos en forma de una plaga de termitas que amenaza con disolver ese comienzo de felicidad conyugal que apuntaba en el horizonte (algo así pasaba en un cuento de Italo Calvino, La hormiga argentina, aunque en aquel el componente angustioso y mágico era superior).
Fante viaja entonces a casa de sus padres, unos agricultores sureños, típicos supervivientes de la Norteamérica rural y supersticiosa. Allí, tras lidiar con los sueños truncados que tenía su padre para él, le convence para que vuelva a su casa, con su mujer, que acaba de quedarse embarazada...
Como véis, un argumento sencillo. Nada pretencioso, a su modo triste. Se trata de describir la rutina de la pujante clase media alterada por los ciclos vitales. Los choques generacioneles en un país que despierta a la industrialización masiva, las contradicciones políticas, las agonías religiosas, lo muermamente cotidiano. Una novela agradable de leer, aunque si esparáis un Bukovski —este siempre dijo que le tenía como maestro— no lo es. Al menos en Llenos de vida.
Título: Llenos de vida
Autor: John Fante
Editorial: Anagrama
Año de edición: 2010
Tipo de edición: digital
PVP: 6, 64 €
Nacho Segurado
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